De una hazaña militar a patrimonio de la humanidad: La Gran Muralla China
Un coloso de piedra y leyenda serpentea a través de montañas y desiertos como un guardián eterno del tiempo. Más que una defensa contra antiguas invasiones, esta maravilla envuelve siglos de historia y misterio, entrelazando la grandeza de una civilización con el susurro de los vientos que la atraviesan.
Tras una visita de Los Tiempos a esta insólita construcción, éstos son algunos datos importantes a conocer sobre el interminable muro de ladrillos, piedras y tierra: la Gran Muralla china.
Este mes, el Gigante Asiático vive uno de los feriados más importantes del año: el Festival de Primavera, fuertemente ligado al Año Nuevo Chino, lo cual implica una temporada alta de viajes y turismo en el país asiático que, sin duda alguna, es aprovechado para que los visitantes conozcan la considerada mayor hazaña en ingeniería militar de la humanidad y una de las maravillas del planeta.
Reconocida Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) desde 1987, la serpenteante obra maestra data la historia de una construcción de hace más de 2 mil años que tenía como objetivo ser frontera defensiva contra los invasores del norte.
Fue erigida de este a oeste del territorio chino por tramos iniciados en el 220 a. C. y continuada durante las dinastías Qin, Han y Ming. Según el estudio arqueológico llevado a cabo en 2012 por la Administración Estatal de Patrimonio Cultural de China, se reveló que tiene 21.000 km de longitud.
Tras subir las desafiantes y diversas escaleras, bajas, largas y, en su mayoría, empinadas, cada torre es un reto cumplido para cual visitante.
Sin embargo, las evidentes torres de control son esenciales para notar que en realidad se trata de un conjunto de murallas de diferentes longitudes y hasta estructuras, conectadas por estos puntos de comunicación militar.
Hoy por hoy, estos espacios son perfectos espacios para el descanso de los miles y miles de turistas diarios que la recorren y deciden tomarse fotografías en ellos.
La Oficina Municipal para asuntos Paisajísticos y Forestales de Beijing estima que el promedio de visitantes diarios es de aproximadamente 50 mil personas, entre los distintos tramos disponibles para su recorrido turístico, lo que refleja a más de 15 millones de visitantes al año.
Tras la pandemia, este número se redujo en un 70 por ciento; sin embargo, este emblema nacional supo recuperar la impresionante afluencia de gente durante los últimos años, incluso llegando a batir récords durante las últimas “Semanas Doradas” —feriados nacionales de una semana que registran el mayor movimiento turístico en el país— entre otros feriados.
Esto debido a que, entre extranjeros y propiamente chinos, acuden a la muralla como acto de turismo recreacional y hasta en peregrinación como símbolo patrio.
Sin duda alguna, la Gran Muralla china es de las maravillas del mundo más visitadas y requeridas por conocer, ya sea por turistas, viajeros, lugareños y demás, para certificar la inmensa obra construida por el hombre que califica como una de las mejores de la historia de la humanidad.
Cinco de los lugares más visitados en China
1. Gran Muralla China: Esta majestuosa estructura se extiende por miles de kilómetros y es uno de los símbolos más reconocidos de China. Construida para proteger al imperio de invasiones, ofrece vistas panorámicas y una profunda inmersión en la historia del país.
2. Ciudad Prohibida en Beijing: Ubicada en el corazón de la capital, este vasto complejo palaciego sirvió como residencia de los emperadores durante las dinastías Ming y Qing. Sus intrincados diseños arquitectónicos y su rica colección de artefactos históricos la convierten en una visita obligada.
3. Ejército de Terracota en Xi’an: Descubierto en 1974, este conjunto de miles de figuras de guerreros y caballos de terracota fue enterrado junto al primer emperador de China, Qin Shi Huang, para protegerlo en el más allá. Cada figura es única, reflejando la artesanía y el poder militar de la época.
4. Río Li en Guilin: Famoso por sus paisajes kársticos, el río Li ofrece cruceros escénicos entre colinas verdes y aguas cristalinas. Este entorno natural ha inspirado a poetas y artistas durante siglos y sigue siendo un destino popular para los amantes de la naturaleza.
5. La Base de Investigación de Pandas Gigantes de Chengdu, Sichuan: famosa en todo el mundo por la protección de este mamífero, que está ubicada en la Avenida del Panda del distrito de Chenghua, en una ciudad en la que Los Tiempos fue testigo de la impresionante caracterización y promoción de este peludo amigo y brinda, desde 1987, una educación científica popular y una base de turismo cultural y paisajístico.