Tropas rusas aceleran el paso en este de Ucrania
Las tropas rusas aceleran el paso en el Dombás al tiempo que incrementan la magnitud e intensidad de los bombardeos en toda Ucrania, a medida que se acerca el primer aniversario, el día 24, de la conocida en Moscú como “operación militar especial”.
Según informó ayer el Estado Mayor ucraniano, el Ejército ruso continúa su ofensiva en cinco direcciones diferentes a lo largo de todo del frente, aunque a costa de grandes pérdidas en sus filas.
Los rusos centran sus esfuerzos principalmente en la región de Donetsk, pero también en las vecinas Járkov y Dnipropetrovsk, en un intento de envolver a las tropas ucranianas desplegadas en el Dombás.
En Donetsk el objetivo ruso es romper las líneas enemigas en las afueras de la capital regional, especialmente en Avdiivka, defendida desde 2014 por los soldados ucranianos más forjados en combate.
Kupiansk es el objetivo prioritario en Járkov, de donde los rusos se tuvieron que retirar deprisa y corriendo hace casi seis meses, uno de los detonantes de la movilización parcial ordenada por el Kremlin.
La confirmación de que Moscú está sufriendo grandes pérdidas en su ofensiva es que el Ejército ruso habilitó un nuevo hospital militar en la región de Lugansk para atender al gran número de heridos que llegan del frente.
Los blogueros militares rusos acusan a los altos mandos militares de repetir los mismos errores que en 2022, lo que explicaría la incapacidad de asaltar los bastiones ucranianos en Donetsk.
El estadounidense Instituto sobre el Estudio de la Guerra aseguró ayer que el problema radica más que en fallos de estrategia en la baja calidad de los reservistas movilizados.