“No vinimos a ser abusados ni menospreciados”: Futbolista boliviano denuncia racismo en Egipto
El delantero reveló que la dirigencia de su club no le devolvió su pasaporte ni cumplió con los pagos acordados

Todo comenzó bien para el delantero boliviano Carmelo Algarañaz tras pasar del Always Ready al Ismaily de la Primera División de Egipto. Comenzó su primera experiencia internacional siendo titular y marcando goles, pero todo se vino abajo en los siguientes meses.
Dejó de ser considerado para el onceno titular y tampoco fue convocado para los partidos oficiales. En algún momento se habló de la posibilidad del retorno al fútbol nacional, pero no hubo un comunicado oficial de él ni del club egipcio hasta este martes, cuando el atacante rompió el silencio.
Publicó un mensaje en su cuenta de Twitter en el que denuncia “racismo severo”, la falta de pago del club y la retención de su pasaporte; además, reveló una intervención en el caso de la Embajada de Bolivia en Egipto.
“Anuncio la finalización de mi contrato con el Ismaily Club de forma unilateral, por incumplimiento de los términos del contrato por parte de la administración del club, una dirección que no sabe cómo tratar a un jugador internacional profesional”, señala la parte inicial del texto difundido por el delantero convocada en varias ocasiones a la Selección Boliviana.
Algarañaz denuncia que “no respetaron mis derechos ni cumplieron con la totalidad de sus obligaciones” y que si bien respetó las decisiones de los entrenadores, le obligaron a entrenar el “Grupo B” durante casi tres meses, “siempre menospreciando mi capacidad”.
Revela que la dirigencia del Ismaily hasta la fecha no le devolvió sus documentos personales y que cuenta con evidencias para demostrar sus denuncias.
“La administración del Club me retuvo el pasaporte de forma premeditada y hasta la fecha no me lo han devuelto, fui objeto de maltrato, racismo severo, amenazas y muchas otras cosas de las que no me gusta hablar ahora, pero afortunadamente cuento con las pruebas suficientes para sostener lo que digo”, reza otra parte del mensaje de Algarañaz.
“Lastimosamente me tocó vivir la cara oscura de un club, como yo seguramente otros también lo vivieron, nosotros los jugadores extranjeros dejamos a nuestras familias y vidas construidas con la esperanza de pertenecer a un buen club y ayudar al mismo a ser mejor, no vinimos a ser abusados ni menospreciados”, agrega.
Finalmente, agradece las gestiones de autoridades diplomáticas de Bolivia en Egipto “por la ayuda brindada para viabilizar el retorno a mi país” y también a sus compañeros del club por “los maravillosos momentos que vivimos como equipo”.
En el mensaje, Algarañaz no precisa si ya se encuentra en el país o continúa en Egipto ni da pistas sobre su futuro en el fútbol.