Denuncian que la Empresa Pública de Cemento está paralizada
La Federación Sindical Originario de Caracollo denunció que la Empresa Pública de Cemento Bolivia (Ecebol) está paralizada desde el 1 de agosto, después de que el presidente Luis Arce “reinauguró” o reactivó la fábrica en el mes de junio.
“Tenemos que lamentar el actuar de ciertas autoridades que están en la parte administrativa de la fábrica asentada en nuestro municipio de Caracollo. Luego (...) de la reactivación de esta empresa estratégica de más de 58 millones de
bolivianos, hoy nos enteramos y confirmamos que sus operaciones de funcionamiento del producto está paralizada desde el 1 de agosto a la fecha. Esto causa un daño económico al Estado y a la región”, dice el pronunciamiento que emitió la organización.
La Federación cuenta con 16 centrales y 65 comunidades, es una organización que respalda el “proceso de cambio” del partido de gobierno. El documento que emitieron se denomina “Informe de las organizaciones sociales sobre la actual situación de la fábrica de cemento Ecebol-Caracollo”.
Corroboraron el informe que ofreció la senadora Lindaura Rasguido, quien realizó una inspección a la fábrica el 6 de septiembre, “Pudimos constatar todo lo malo que está la fábrica de cemento Ecebol a la cabeza del gerente de Ecebol, José Luis Jiménez”.
Acusan a dicho funcionario de ser el responsable de la situación actual de la empresa estatal, por su negligencia y toma de decisiones equivocadas, además de contar con presuntas denuncias de arbitrariedades.
En ese marco, exigieron la renuncia inmediata de Jiménez, y del ministro de Desarrollo Productivo, Néstor Huanca, a quien acusan de “encubrir” de los “malos actos” del gerente de la empresa. Otorgan 72 horas para que ambos servidores públicos renuncien a sus cargos.
Asimismo, exigen la reestructuración de todo el personal, porque demostraron ineficiencia e incapacidad a lo largo de todo este tiempo, porque la gente no tuvo el aval de las universidades, sino que ingresó gente por la decisión personal de
Jiménez. De no responder a sus demandas, la Federación anunció iniciar medidas de presión como el bloqueo de carreteras y no descartan un paro indefinido en Oruro.