Hace unos años conseguí que mis odiadores me pusiesen por enésima vez a caldo porque en una entrevista se me ocurrió decir que yo no había trabajado en mi vida. Esa gente entrañable debió de pensar que por fin salía del armario, que esta vez sí me habían pillado, que pronto reconocería que en realidad era nieto del vizconde de Ibahernando e hijo de un potentado extremeño y por eso no había dado un palo al agua en mi vida. Pero la... + Leer noticia completa
Notibol es un agregador informático de noticias y no es responsable del contenido de los enlaces a los sitios externos que generan las noticias.
Acerca de Notibol | Contacto | Política de Privacidad | Descargo de Responsabilidad