El 6 de agosto, el presidente Arce propuso un referéndum con cuatro preguntas. Fue presentado por la élite en el poder como el gran divisor de aguas en la economía y política boliviana, casi como si fuera un demiurgo que develaría la voluntad popular y resolvería todas las dificultades que enfrenta Bolivia. Además, la propaganda del régimen lo posicionó como una jugada política maestra, un movimiento que, en el lenguaje popular, se... + Leer noticia completa
Notibol es un agregador informático de noticias y no es responsable del contenido de los enlaces a los sitios externos que generan las noticias.
Acerca de Notibol | Contacto | Política de Privacidad | Descargo de Responsabilidad