Durante la homilía dominical, la iglesia Católica condenó las muertes de jóvenes en la universidad de Potosí y en Tinguipaya “víctimas de la lucha por privilegios y el poder”, afirmó ayer monseñor Sergio Gualberti. “Basta de violencia, odio y rencores. Cuándo nos convenceremos que solo a través del diálogo abierto y sincero y de la concertación se solucionan los problemas”, indicó el arzobispo de Santa Cruz, monseñor Sergio... + Leer noticia completa
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