Página Siete / La Paz El fútbol boliviano vivió ayer una bochornosa jornada. Los futbolistas de Real Santa Cruz y Wilstermann ingresaron al campo de juego y se negaron a jugar. Los jugadores le comunicaron al árbitro Alejandro Mancilla que no iban a jugar y el juez central dio por suspendido este cotejo, que debía abrir la primera fecha del campeonato de la División Profesional. Va como partido suspendido porque no se ha... + Leer noticia completa
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