La Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) descubrió un cargamento de 7.2 toneladas de cocaína en el puerto del Callao, uno de los más grandes en la historia del país.
Un operativo en Aduanas, con la participación de canes entrenados, de la división K9, marcó el inicio de las diligencias que terminó con la incautación del material ilegal.
La droga estaba camuflada en un cargamento de baldosas de madera proveniente de Bolivia y tenía a Bélgica como destino.
El cargamento estaba valorizado en más de 10 millones de dólares para el mercado local; sin embargo, podía alcanzar los 300 millones de dólares en transacciones internacionales.
“Esta acción representa un duro golpe para las economías de las organizaciones internacionales de tráfico ilícito de drogas”, afirmó el director de la Dirección Antidrogas (Dirandro) de la Policía Nacional del Perú (PNP), el general Zenón Loayza.
¿Cuál es la conexión con Bolivia?
De acuerdo a la Policía, este hecho estaría relacionado con el decomiso de 8.7 toneladas de cocaína por parte de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) de Bolivia, en el puesto fronterizo de Tambo Quemado, en diciembre del 2023.
Las unidades especializadas peruanas siguieron con las investigaciones y lograron detener a esta mafia internacional inspeccionando continuamente las embarcaciones provenientes del país sureño.
Redacción Ver.bo
Fuente: IB