El sábado, en el barrio Finca Santa Anita, se produjo un grave episodio de violencia familiar que involucró a una joven de 19 años y su beba de apenas 12 días. La mujer fue agredida físicamente por su pareja de 22 años, quien, tras la discusión, arrebató a la bebé y la llevó a otro domicilio, desencadenando una intervención policial. La joven sufrió diversas lesiones, entre ellas golpes en los pómulos izquierdo y derecho, así como otras heridas producto de un golpe con un elemento contundente. Afortunadamente tras ser rescatada por personal policial de la comisaría de San Remo, la menor se encuentra en buen estado de salud, y fue entregada y alimentada por su madre tras los momentos de tensión.
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El sábado, en el barrio Finca Santa Anita, se produjo un grave episodio de violencia familiar que involucró a una joven de 19 años y su beba de apenas 12 días. La mujer fue agredida físicamente por su pareja de 22 años, quien, tras la discusión, arrebató a la bebé y la llevó a otro domicilio, desencadenando una intervención policial. La joven sufrió diversas lesiones, entre ellas golpes en los pómulos izquierdo y derecho, así como otras heridas producto de un golpe con un elemento contundente. Afortunadamente tras ser rescatada por personal policial de la comisaría de San Remo, la menor se encuentra en buen estado de salud, y fue entregada y alimentada por su madre tras los momentos de tensión.
La intervención policial se llevó a cabo tras la denuncia de la madre de la bebé, quien alertó a las autoridades sobre la situación de riesgo en la que se encontraba su hija.
De acuerdo con el relato de la víctima, el altercado comenzó cuando la pareja, con la que tiene una hija en común, comenzó a discutir. Durante la confrontación, el agresor la golpeó y, en un acto de extrema violencia, se llevó a la pequeña de 12 días de vida, dejando a la madre en estado de shock. Ante la situación personal policial de la comisaría de San Remo intervino y se dirigió hacia la casa de la cuñada de la joven madre en el Barrio Círculo III, sospechando que la niña podría estar allí. Sin embargo, la mujer negó tener a la bebé y no permitió el ingreso de la policía al lugar, lo que provocó el traslado de la mujer, hermana del agresor, a la dependencia policial.
Según informaron fuentes policiales, cuando el personal regresó al lugar, observaron al agresor con la menor en brazos en el interior de la vivienda, en un estado alterado. La hermana del agresor permitió el acceso solo a una oficial femenina, lo que provocó un nuevo enfrentamiento entre las partes. Durante la discusión, el hombre continuaba realizando movimientos bruscos con la bebé en brazos, sin acceder a entregarla. Ante la creciente tensión y el evidente riesgo para la menor, las autoridades decidieron intervenir para resguardar su integridad.
Finalmente, el agresor cedió y entregó a la bebé a los efectivos policiales. El hombre fue trasladado en el móvil policial a la dependencia. Cabe destacar que durante la intervención, una oficial fue mordida en la pierna izquierda por un perro de raza bóxer, aunque la mordedura no causó daños graves, solo algunos raspones.
La madre de la bebé, quien presentaba golpes en su rostro y otros signos de agresión, radicó la denuncia contra su pareja y su cuñada por lesiones físicas. En consulta con la Fiscalía de Violencia Familiar y Género N° 5, la Dra. Leucona dispuso la detención del agresor, quien posee una medida cautelar previa que le prohíbe acercarse a la víctima a una distancia de 300 metros.
El hombre quedó detenido bajo la acusación de lesiones agravadas por el vínculo, con una audiencia programada para esta semana ante el Juzgado de Garantías N° 7, presidido por el Dr. Pablo Zerdán.
Ante la consulta, el comisario Fortunato Coria, a cargo de la Comisaría Regional Nº10 del Barrio San Remo, explicó a El Tribuno, que el agresor, quien mantenía una relación con la víctima desde que ella tenía 16 años, mostró un comportamiento violento y alterado durante todo el procedimiento. Además, indicó que el hombre se encontraba bajo los efectos de sustancias psicoactivas, lo que complicó aún más la situación.
Por su parte, la bebé fue entregada a su madre, quien, tras ser revisada por personal médico, recibió 15 días de curación por los golpes sufridos. Afortunadamente, la menor se encuentra en buen estado de salud y fue alimentada por su madre tras el rescate.
Este caso resalta la gravedad de la violencia familiar y la importancia de la intervención policial rápida para proteger a las víctimas, en especial a los menores de edad. Las autoridades continúan trabajando para garantizar la seguridad de las personas afectadas y el cumplimiento de la justicia en este caso.
El agresor, quien quedó detenido, enfrentará las consecuencias legales de sus actos en la audiencia programada para este lunes.
